En un acto conmemorativo por los 46 años del tsunami que marcó la memoria colectiva de Tumaco y del Pacífico nariñense, la Gobernación de Nariño y la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD) pusieron en marcha una nueva etapa de protección y prevención para miles de familias del Pacífico colombiano, con la adquisición e instalación de la primera boya de detección de tsunamis DART-4G. Esta tecnología de vanguardia permitirá captar en tiempo real eventos de tsunami y activar protocolos de respuesta inmediata, orientados a salvar vidas y reducir la incertidumbre frente a emergencias marinas.
Durante el evento, el Director de la UNGRD, Carlos Alberto Carrillo, destacó la importancia de recordar con respeto aquella madrugada en 1979, cuando un tsunami devastó buena parte de Tumaco, y subrayó que la nueva boya representa un cambio histórico en la capacidad de respuesta del país: “Esta es una de las tecnologías más avanzadas del mundo para detectar tsunamis con anticipación. Podemos reducir la incertidumbre y emitir alertas con mayor velocidad”. La tecnología se integrará al Centro Nacional de Alerta por Tsunami (CNAT) de la DIMAR y al Sistema Nacional de Detección y Alerta por Tsunami (SNDAT), fortaleciendo todo el sistema nacional de alerta temprana.
El Gobernador de Nariño, Luis Alfonso Escobar Jaramillo, enfatizó que esta iniciativa es una concreción de responsabilidades estatales para salvar vidas en un territorio de 1.345 kilómetros de costa: “Lo más importante es salvar vidas. Las inversiones que hacemos aquí transforman la prevención en acción real”. Con la entrega de la Orden Gobernación de Nariño en grado de Gran Cruz al Director Carlos Carrillo, la Administración Departamental puso en el centro la justicia territorial como parte esencial de la gestión de riesgo.
Por su parte, Teresa Das Neves, Secretaria de Gobierno de Tumaco, resaltó el valor comunitario y la coordinación interinstitucional para fortalecer la prevención desde las bases sociales: “No podemos evitar lo que no controlamos, pero sí podemos disminuir sus impactos. La prevención y el trabajo articulado con gobiernos y comunidades es fundamental para proteger vidas”. Esta perspectiva refleja un enfoque de derechos, donde el sistema de gestión del riesgo no solo responde a emergencias, sino que educa, articula y empodera a las comunidades.
Las acciones de la UNGRD en Nariño han ido más allá de la adquisición tecnológica. En menos de dos años, la entidad ha liderado inversiones conjuntas con la Gobernación del orden de más de $78.000 millones en mitigación de riesgos, reasentamientos y ayuda humanitaria en zonas de alto riesgo como Aponte, Pasto y el propio Pacífico nariñense, beneficiando a miles de familias mediante sistemas de alerta temprana, reasentamientos de comunidades indígenas en zonas seguras y apoyo directo ante desastres naturales.
Además de la boya DART-4G, la UNGRD ha entregado más de 4.300 kits humanitarios a familias damnificadas por inundaciones en Tumaco y zonas rurales, ha intervenido en la rehabilitación de infraestructura básica y ha apoyado la actualización de planes de gestión del riesgo volcánico y climático en varias subregiones del Departamento de Nariño, reforzando la resiliencia territorial ante fenómenos naturales.
Este acto conmemorativo en Tumaco inscribe un nuevo capítulo en la historia de la gestión del riesgo en Colombia, donde la ciencia, la tecnología y la coordinación institucional convergen para proteger comunidades costeras, reducir vulnerabilidades y consolidar la cultura de prevención como pilar de la dignidad humana y la paz territorial.
