La Gobernación de Nariño y el Programa Mundial de Alimentos (PMA) de las Naciones Unidas oficializaron una alianza estratégica para fortalecer la Seguridad y Soberanía Alimentaria y Nutricional de las poblaciones más vulnerables del departamento.
El memorando de entendimiento permitirá articular acciones conjuntas, dirigidas a niñas, niños, mujeres cabeza de hogar, personas mayores, grupos étnicos, migrantes y comunidades en riesgo de inseguridad alimentaria y nutricional, con el propósito de garantizar el Derecho Humano a la Alimentación, fortalecer medios de vida y avanzar en los Objetivos de Desarrollo Sostenible, especialmente el Hambre Cero y el Fin de la Pobreza.
“Este memorando nos permite fortalecer iniciativas como los Bancos de Alimentos, el Plan de Alimentación Escolar y otras acciones que protejan el derecho de las comunidades a alimentarse con dignidad”, señaló el Gobernador de Nariño, Luis Alfonso Escobar.
Entre los objetivos acordados se destacan:
1- Fortalecer la capacidad institucional para ampliar el acceso de poblaciones en pobreza y vulnerabilidad a programas sociales sensibles al género y al Derecho Humano a la Alimentación.
2- Implementar mecanismos de protección social adaptativa como respuesta a emergencias y choques climáticos.
3- Mejorar la empleabilidad y apoyar emprendimientos productivos en zonas rurales, urbanas y periurbanas.
4- Respaldar proyectos enmarcados en el Plan de Desarrollo “Nariño, Región País para el Mundo” y el Plan Estratégico de País del PMA.
Por su parte, Nils Grede, Director del Programa Mundial de Alimentos en Colombia, destacó que esta alianza se guiará por un enfoque transversal de paz total, género, étnico, comunitario, territorial y ambiental, y permitirá fortalecer capacidades locales a través de compras públicas, el Programa de Alimentación Escolar (PAE) y sustitución de cultivos, entre otros programas.
“Nariño tiene dos procesos de paz en marcha, lo que crea las condiciones para traer recursos internacionales y apoyar a las comunidades a producir sus propios alimentos y dejar atrás los cultivos ilícitos”, afirmó.
Esta articulación potencia la estrategia de seguridad y soberanía alimentaria en Nariño, al priorizar la agricultura rural, la inversión social, la asistencia técnica, la comercialización y la calidad alimentaria como pilares para garantizar derechos y consolidar la paz territorial.
