Con el propósito de reducir los índices de siniestralidad en las vías del Municipio de Barbacoas, la Subsecretaría de Tránsito Departamental iniciará un diagnóstico para definir la señalización horizontal, vertical y la instalación de reductores de velocidad en los puntos más críticos del municipio.
El Subsecretario de Tránsito, Wilson Bucheli Ordóñez, explicó que, con base en el Plan Local de Seguridad Vial, la primera fase del proceso contempla acciones de sensibilización dirigidas a conductores, pasajeros y peatones, con el fin de fortalecer la cultura ciudadana y el respeto por las normas de tránsito.
El Municipio de Barbacoas ocupa el segundo lugar en Nariño con el mayor número de víctimas fatales por siniestros viales: nueve casos en 2025, ocho más que en 2024. Las autoridades explican que este incremento está asociado al accidente ocurrido en el sector de La Columpia, vía al corregimiento de Junín, donde el volcamiento de un camión militar causó la muerte de nueve soldados en febrero.
La Jefe de la Oficina de Movilidad de Barbacoas, Ana Cristina Ortiz, señaló que otro factor que agrava la situación es la ocupación del espacio público en la zona urbana, donde circulan cerca de 800 vehículos entre automóviles y motocicletas. El uso indebido de áreas peatonales y vehiculares por comerciantes, vendedores informales y constructores que depositan materiales en los andenes, genera congestión y pone en riesgo la seguridad de los peatones.
La Administración municipal desarrolla campañas permanentes para mejorar la movilidad. Sin embargo, se enfatiza en la necesidad de fortalecer la cultura ciudadana y el cumplimiento de las normas de tránsito, especialmente para proteger la integridad de los peatones.
Para la lideresa Yorleny Palacios Preciado, la falta de conocimiento y conciencia sobre las normas viales es una de las principales causas de los accidentes. “Si se respetan los espacios, se pueden salvar vidas, sobre todo las de los niños, que son los más vulnerables”.
La Oficina de Movilidad advierte que el exceso de velocidad y la conducción bajo efectos del alcohol son conductas recurrentes, razón por la cual resulta urgente intervenir con señalización adecuada y estrategias educativas que promuevan la responsabilidad en las vías.
