En un esfuerzo histórico por garantizar la tranquilidad durante la temporada decembrina y el Carnaval de Negros y Blancos, 1.000 uniformados llegarán a Nariño, así lo anunció el General José Luis Ramírez Hinestroza, Jefe Nacional de la Policía. Este despliegue se da en el contexto de un logro significativo: el departamento registra las cifras más bajas de acciones violentas en dos décadas, según reportes entregados por la Policía Nacional.
El Gobernador de Nariño, Luis Alfonso Escobar, lideró gestiones ante la Dirección Nacional de la Policía, logrando priorizar tres líneas estratégicas de seguridad:
- Neutralización de grupos armados organizados y disidencias: En coordinación con el Ejército Nacional, se implementará una estrategia integral liderada por el Comandante de la Región de Policía Número 4 para reforzar la seguridad territorial.
- Fortalecimiento de capacidades de investigación criminal e inteligencia: Enfocado especialmente en el municipio de Ipiales, donde se busca cerrar fronteras frente a grupos de delincuencia organizada que amenazan la estabilidad de la región.
- Identificación de células criminales urbanas: Este componente se orientará a neutralizar actividades delictivas en zonas urbanas críticas.
Además, para las festividades en Pasto, se prevé el uso de un helicóptero y drones de la Policía Nacional, mejorando la vigilancia aérea y la percepción de seguridad.
El Gobernador Luis Alfonso Escobar, destacó también el apoyo del Gobierno Nacional para reforzar la seguridad en zonas estratégicas como Puerto Remolino, donde se busca adquirir un lote para la construcción de un puesto de Policía.
Finalmente, el General José Luis Ramírez Hinestroza confirmó que las nuevas unidades policiales se distribuirán de la siguiente manera: 600 efectivos para Pasto, 100 para Ipiales y 300 más para el resto del departamento. Este refuerzo se suma a las unidades especializadas ya desplegadas en la región, consolidando un plan integral para garantizar la paz y el disfrute de las fiestas de fin de año y carnavales.
